lunes, 10 de octubre de 2011

Tiempo de decidir (2a entrada final)

Diez días han pasado desde que fue decretada y puesta en vigor la ley que dicta la vigilancia de cada ciudadano en un padrón electrónico. Nuevamente y como era de esperarse la sociedad se volvió a dividir; por un lado los resignados y pacifistas que sin mayor objeción aceptaron las condiciones del gobierno y los siempre presentes oportunistas y  por el otro, los eternos grupos de resistencia, que obviamente aborrecen cada regla autoritaria y todo lo que representan.

Todo esto no es nuevo. Sin embargo, hago constar la forma en que el país comienza a fragmentarse. A estas alturas es momento de definir de qué lado formaremos parte; como mencione al principio hay dos bandos muy bien marcados. El primero de ellos y con menor cantidad de simpatizantes es el grupo de “derecha”. Compuesto en su mayoría por los que aceptan la ley, algunos por resignación otros porque recibirán “trato privilegiado” de las autoridades, o al menos esa fue una garantía que el gobierno les dio si aceptaban inscribirse; la segunda fracción, esta vez con mayor convocatoria que "la derecha,” es la Resistencia Social a Favor de la Libertad, así es como se autodenomino el grupo de izquierda. El resto de las personas que no se inclinan hacia algún bando, permanecen expectantes al desarrollo de la lucha que comienza para actuar según convenga a sus intereses, es decir;  si el Estado vence simplemente aceptan y evitan ser perseguidos o tachados como rebeldes – más adelante describiré un poco lo que significa pertenecer a la “izquierda” – y en el caso opuesto, si  la resistencia logra derrocar dicha ley y triunfar sobre el Estado, con toda calma gozan de los beneficios.

Ahora me gustaría detallar un poco en algunos aspectos que he mencionado y que son muy importantes para poder comprender la magnitud que esta ley tiene en este momento. Respecto al  “trato privilegiado” que fue ofrecido por el gobierno si uno aceptaba ingresar por “propia voluntad” al padrón, destaca lo siguiente: al registrarse dentro del límite de tiempo y forma establecidos por el gobierno, las familias inscritas podrán formar parte de un comité de vigilancia y monitoreo de redes. Esto les daría ventaja sobre todos los demás ciudadanos porque al final todos sin excepción tendrán que registrarse. Analizando este “privilegio” lo único que hace el Estado es lavarse las manos, al final su intensión es que entre el pueblo se haga la cacería.

Ya he comentado a manera general que significa estar en “la derecha” pero ¿qué pasa con los izquierdistas.? Pertenecer a este grupo es muy complicado, lleva consigo además de un sacrificio económico, familiar y personal el estigma de escoria de la sociedad, de cáncer, de alguien que no merece vivir y si vives eres  perseguido  con una marca de tiro al blanco en la espalda.
Personalmente siempre me había mantenido al margen de muchos problemas actuales. Nunca me sentí perjudicado ni vi dañado a algún ser querido. Soy estudiante, tengo a mi familia y amigos, esto siempre había sido así, todos escuchábamos los problemas pero nada cambiaba, hasta hace dos días.
La familia de un compañero forma parte del comité que vigila las redes y movimientos con tendencias subversivas, nunca pensaron que algún día tendrían que denunciar y encarcelar por ello a sus propios amigos y familia y hace dos días lo hicieron.

Ya no soy ajeno a estos problemas. Fui testigo de cómo dos amigos – ambos compañeros míos de la universidad - se destruyeron por causa de una ley completamente fascista  y de cómo el plan del gobierno de la autodestrucción se estaba haciendo realidad. El Estado no intervino en esto, solo manipulo las necesidades y el miedo, el resto, nosotros mismos lo ejecutaremos a la perfección, sin tener un manual que indique como hacerlo.

Es tiempo de tomar decisiones la primera y más importante: ¿de qué lado estás tú?
Antes de hoy no pensaba en pertenecer a algún grupo especifico, pero todo esto cambio a raíz de lo que presencie. Hoy puedo decir que prefiero estar a favor de mi libertad y la de mi familia. 

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